Vivimos una época en la que todo va demasiado rápido, en la que los saberes ancestrales parecen diluirse en la bruma del olvido. Todo es cortoplacista, irreflexivo, de moda pasajera y de conocimiento frugal y vertiginoso. El trabajo de la cosmética artesanal y el uso y percepción de las distintas plantas, así como su aprovechamiento es una labor que requiere tiempo y paciencia. Salir al monte y recolectar diferentes plantas, flores y semillas para utilizarlos en formulaciones cosméticas ha sido algo que ha estado siempre muy presente en nuestra familia. El interés y amor por la naturaleza es nuestro modo de vida.
Rodeados de comodidades y de tecnología vemos como los saberes que generación tras generación se han utilizado para el cuidado de la piel son sustituidos por cosméticos artificiales, elaborados con infinidad de productos químicos y derivados sintéticos con todo lo que ello acarrea para nuestra salud. En nuestro caso, nos ha gustado nadar siempre a contracorriente, asumiendo muchas veces unas contrariedades y vicisitudes difíciles pero que tras el paso de los años han dado resultados y hoy en día nos erigimos como una de las marcas de cosmética natural con más prestigio y reconocidas del mercado hecho que sin duda se debe a nuestra fidelidad hacia el saber por lo verdaderamente natural y artesanal en la elaboración de nuestros maravillosos cosméticos.
Asentados en la comarca de Sanabria donde la naturaleza es la clara protagonista de nuestro día a día, la comunión entre medio ambiente y artesanía es total. Aquí los tiempos de fabricación son respetados con suma delicadeza guiados siempre por el ritmo constante y armonioso de las estaciones del año que constituyen en marcapasos eficaz y resuelto para que el trabajo final sea sobresaliente.
El proceso de elaboración de nuestras cremas y aceites es totalmente artesanal y manual de principio a fin. En ningún momento se utiliza herramienta mecanizada ni producción en cadena. Cada cosmético es elaborado de forma minuciosamente artesana respetando los tiempos necesarios de maceración, emulsión, y finalmente secado y maduración que un producto 100% natural de estas características requiere.
Nuestra cosmética es ante todo sencilla, natural y ecológica, que recuerda a lo ancestral, que pone en valor lo artesanal y potencia el producto local como el ingrediente esencial de nuestras elaboraciones.
La naturaleza es lo que nos mantiene vivos y sanos ya que formamos parte indisoluble de ella. Nuestro fin último es que a través del uso de nuestros cosméticos nuestros clientes puedan ser partícipes de esa unión con lo natural, ser receptores de sus virtudes y recobrar la memoria perdida del uso de las plantas naturales en nuestro día a día.